Siempre he querido tener un pequeño apartamento. Compartir mi vida con un gato siamés y tener una habitación claustrofóbica llena de libros. Dentro de ella; únicamente un sofá cama y una mesita. Quizás alguna que otra vela de esas que huelen, que me encantan.
Sí, me gustaría ser una chica solitaria que pasea los domingos con coleta y camiseta. Quiero tener un teléfono rojo vintage y algún que otro cuadro de París. También me gustan las reliquias; una cámara vieja o una tele oxidada no me importaría; me magnetizan esas cosas tan simples y olvidadas. Y fotos. Muchas fotos por las paredes; en blanco y negro supongo, y de quien más bello o bella me parezca a mí.
También quiero tener a buen resguardo una botella de whiskey de ese que se bebe seco para las noches tristes y alegres.
Pero… alguien se empeña en tener un ático compartido conmigo. Sin gatos, sin libros, sin camisetas… desnudez todo el tiempo.
Me lo pensaré…
;)